José
Castillo:
Estaba enviado por el SAG a cargo del Centro de Reforma
Agraria San Carlos-Santa Marta en el
sector Estancia Leones, desde marzo de
1973, nombrado por Don Alberto Saini. Nos manteníamos informados escuchando
radio. El 10 en la noche nos fuimos a
Río Tranquilo y alojamos, como lo hacíamos siempre, en el retén de la
localidad. A las 06.00 AM, un carabinero de apellido Vargas, nos indica que
está la tendalada en Santiago. Luego ordenaron volver al predio y traer para
entregar el equipo de radio que había. El mismo 11 en la tarde vimos atracar al
vapor Andes y a los carabineros hacer una allanamiento al barco. También, recuerdo haberle dicho a Mario Labrín, cuya
señora era la Directora del colegio, que sacara un pompón negro que había
colocado, para que no tuviera problemas.
Pedro Araya:
Tenía muy pocos años y estaba muy enfermo de la
garganta. Mi mamá me llevó al policlínico cercano a mi casa a eso de las siete
y media de la mañana. Habíamos
sacado número cuando llegaron las enfermeras y auxliares muy
nerviosas. Pusieron la radio en los parlantes y cundió el pánico. No llegaron
los médicos y no hubo atención. A eso de
las 8.30 de la mañana no quedaba nadie y nos fuimos de nuevo a la casa. El
resto del día estuve viendo monos animados: el Oso Yogi y Tiro Loco Mc Craw.
Gloria Schadebrodt:
Estaba en segundo medio en el
Liceo San Felipe y fui a clases en forma normal. A media mañana, el Padre
Herminio interrumpe la clase y nos dice
que hay un cambio de gobierno, que la situación es delicada y que debemos
retirarnos a nuestras casas, sin distraernos ni desviarnos. Al llegar a la
casa, mi madre había puesto una bandera, pero yo le pedí que la guardara porque
a partir de las palabras del cura, intuía que lo que estaba pasando podría ser
muy complicado.
Don Luis Care:
Estaba trabajando como mecánico
en el actual galpón. Teníamos a cargo 40 y tantos vehículos (jeeps rumanos,
broncos, chevrolet, land rovers, camionetas international, camiones y además
seis tractores y muchas
cosechadoras,arados y cultivadoras). El Jefe del Taller era Don Raúl
Duarte que después se lo llevaron detenido y ya no volvió a trabajar al SAG. Yo
vivía donde ahora vive Eduardo Catalán. Una patrulla militar nos allanó y despegaron las paredes de la casa buscando.
Mi hijo les agarró miedo. Luego cada vez que veía uno en la calle se asustaba.
Como el doce me vinieron a buscar de la intendencia, y me ordenaron hacerme cargo del taller y devolver rápido los vehículos de las otras
instituciones y quedarnos sólo con los del SAG.
Hernaldo Saldivia:
Yo trabajaba para el SAG, pero
junto con el colega Max Ordóñez, estábamos destacados en la Empresa Nacional de
Semillas, en calle moraleda con Parra (actual gobierno regional). Esta empresa
tenía un poder de compra de semilla de pasto ovillo. Las máquinas
seleccionadoras estaban en un galpón en la Avenida Ogana. De ahí nos fuimos al
SAG y luego a la casa por el toque de queda y me quedé sin ver a mi polola.
Julio Cerda:
Temprano en la casa de mi
familia, en Kennedy con Benito Juárez, vi pasar la comitiva de Allende desde
Tomás Moro a la Moneda. Estaba en quinto año de Medicina Veterinaria. Llamé por
teléfono y por recomendación de mis
amistades, me quede en la casa. Ví el bombardeo de la casa presidencial de
Tomás Moro y la explosión en el Hospital Militar de un rocket que se desvió.
Alejandro Zúñiga:
Yo en esa época……estaba en Bolivia……o en Coquimbo……..
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